El pasado 17 de julio, no fue un lunes cualquiera para los paseantes de Maisonave. El popular vendedor de “regaliz”, esa raíz comestible tan popular en el campo alicantino, (o regalicia, como le llaman en algunos lugares) ya no está en su esquina habitual.

Una pareja de la Policía Local le levantó un acta de inspección por carecer de autorización municipal para la venta ambulante. Además de abrirle un procedimiento sancionador por parte de la Unidad de Ocupación de Vía Pública de la Policía Local, a José le intervinieron la mercancía. Es decir, los agentes del cuerpo local de policía le incautaron todo el regaliz que tenía en su poder.

El viernes pasado volvió por Maisonnave, cargado con su bolsa de regaliz recién cogido, sin la sillita ni el cajón que siempre le acompañaban. Estuvo paseando un rato, recibiendo una y otra vez los ánimos de los viandantes, unos extrañados por no verlo hace días y otros, conocedores de lo que pasó, le mostraron su apoyo. Miedoso por si volvía a aparecer la policía y la emprendían con él

La principal preocupación de José es la repercusión que pueda tener el expediente sancionador que le han abierto. Le podría caer una sanción de entre 100€, si los agentes consideran la infracción como leve, a 3.000€, si creen que lo infringido se puede considerar como muy grave. Fotos de José del DIARIO INFORMACIÓN