Los alumnos «expulsados» del Bachillerato de los concertados no tienen plaza en institutos de su zona y tendrán que aceptar ir «donde haya hueco»
Los colegios concertados afectados por la supresión de los conciertos de Bachillerato han organizado varias acciones para protestar por lo que consideran “un recorte de libertades en la educación en la Comunidad Valenciana”.
Las familias de Alicante se sienten doblemente perjudicadas, porque no hay suficientes plazas en los institutos públicos de su zona para matricular a sus hijos, lo que les obliga a elegir centro alejados de su lugar de residencia, si no quieren pagar la plaza antigua como privada.
El próximo sábado 6 de mayo, a las 18:00h., se ha convocado en Valencia una manifestación, que partirá desde la plaza San Agustín y llegará hasta la Porta de la Mar.
La decisión se ha tomado durante el encuentro promovido por la Federación Católica de Asociaciones de Padres de Valencia (FCAPA). Su presidente Vicente Morro ha explicado que quieren sumar todos los apoyos posibles, como familias, alumnos afectados, colectivo de profesores, sindicatos y titulares de centros concertados.
La supresión de la aulas de Bachillerato concertadas en Alicante desplaza de su distrito escolar a los alumnos afectados, que tendrán que buscar plazas “allí donde haya libres”.
Los alumnos afectados tendrán que conformarse con las plazas libres disponibles
Las familias afectadas por la supresión de 203 plazas concertadas en primero de Bachillerato en la ciudad de Alicante se sienten «doblemente perjudicadas», porque ahora se encuentran con el problema de que no hay suficientes huecos en los institutos públicos de su zona escolar para matricular a sus hijos, lo que les obliga a elegir centro alejados de su lugar de residencia, si no quieren pagar la plaza antigua como privada.
Según los datos elaborados por el sindicato mayoritario de la enseñanza concertada, Fsie, en función de la actual ratio por aula y vacantes que quedan en los institutos de enseñanza pública, en el conjunto de la ciudad habría 183 vacantes en aulas de primero de Bachillerato. Estas plazas no bastan para absorber a los 203 alumnos que saldrían de las aulas concertadas suprimidas. Faltarían una veintena de plazas.
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